Preparación de superficies

Si se requiere una inspección visual de una estructura metálica, se necesita un tratamiento de almacenamiento, de lijado, rectificado, instalación. El sistema será sellado para asegurar la mejor adherencia de los revestimientos anticorrosivos, prolongando su vida útil. Se realizará una correcta supervisión de las superficies, eliminando óxidos, cascarilla de laminación y otros contaminantes visibles e invisibles (polvo, grasa, sales solubles, residuos, etc.) de la superficie. Generar el perfil de rugosidad adecuado para lograr la máxima adherencia. En proyectos entendemos la importancia de este proceso, por ello, cumplimos siempre con las normativas y protocolos específicos.

Métodos de preparación de superficies

Para garantizar la durabilidad y la fijación óptima de los revestimientos anticorrosivos, los profesionales de PROINDUS son expertos en una amplia gama de técnicas de preparación de superficies:

Limpieza con agua, disolventes y agentes químicos:

Se realiza un lavado inicial para eliminar aceites, grasas, suciedad, óxidos sueltos y otros contaminantes.

Desengrase químico y ácido:

Eliminación de residuos mediante el uso de agentes químicos para limpiar la superficie.

Herramientas manuales y mecánicas:

En áreas donde no se puede usar chorro abrasivo convencional, empleamos herramientas y maquinaria avanzada para alcanzar niveles de limpieza similares.

Chorreado abrasivo seco:

Utilizando una variedad de abrasivos y granulometrías, este método tradicional adapta la limpieza y rugosidad a los requisitos específicos con materiales como minerales, metálicos, plásticos o naturales.

Chorreado en húmedo o blasting:

Es un proceso de limpieza y preparación de superficies que combina abrasivos con agua a presión. A diferencia del chorreado en seco, esta técnica utiliza una mezcla de agua y material abrasivo que se proyecta a alta velocidad sobre la superficie a tratar.

Granallado automático:

Diseñado para superficies grandes y planas como fondos de tanques o cubiertas de buques. Es un sistema de circuito cerrado que minimiza la emisión de polvo.

Estas técnicas permiten a PROINDUS adaptar la preparación de superficies a las necesidades específicas de cada proyecto, asegurando los mejores resultados en protección anticorrosiva.